Muchas veces he leído que la felicidad no es un estado permanente, solo son momentos pasajeros que vienen y se van. Reconozco que esa afirmación me provocaba mucha tristeza, porque considero que hemos venido a este mundo para ser felices….. Pero cuando descubrí el mundo de la fotografía y su verdadera esencia, simplemente la amé, porque entendí que podía inmortalizar esos momentos efímeros de felicidad que se nos escurren entre los dedos y que por fin podía hacerlos eternos..!